Los ayuntamientos de la comarca de A Coruña afectados por las restricciones impuestas por la Consellería de Sanidade desde el viernes han vivido un fin de semana sin incidencias destacadas. En la mañana de este lunes el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, y los alcaldes del área han mantenido una reunión para evaluar el desarrollo de la crisis en la zona.

Vázquez Almuiña ha destacado, a través de un comunicado de prensa, la necesidad de conseguir una «buena coordinación» entre instituciones para la «detección y diagnóstico precoz» de los contagios para frenar la expansión del virus. El responsable autonómico ha invitado a los alcaldes a trasladar «propuestas» para implementar en cada uno de los municipios.

Por su parte, la Policía Local de Cambre ha informado, en una nota de prensa, que, desde el pasado jueves, interpuso siete denuncias a particulares por no llevar puesta la mascarilla, sobre todo, apostilla, «a grupos de jóvenes». Los agentes también apercibieron al responsable de un local que excedió la hora de cierre de las 1.00 horas en la madrugada del sábado.

El Ayuntamiento cambrés también añade que recibió un centenar de llamadas de vecinos del municipio para exponer «dudas» sobre las medidas anunciadas por el DOG en la noche del viernes. El alcalde de esta localidad, Óscar García Patiño, ha pedido la «colaboración» de todos los vecinos, pero también ha apuntado que, «salvo excepciones», se cumplieron las medidas.

El regidor, durante el encuentro con el conselleiro, le trasladó su «preocupación» por la práctica deportiva por «posibles riesgos» con corredores, ciclistas y usuarios que «comparten el mismo espacio».

Por parte del Ayuntamiento de A Coruña califican el fin de semana de «tranquilo» y niegan que haya habido incidencias relacionadas con las nuevas medidas dictadas por el Sergas.

El alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, considera un «escándalo» que la Xunta cancelara dos regatas en Perillo y Mera porque las traineras estaban ocupadas por 12 personas. «Qué diferencia hay entre diez o doce», ha reprochado el regidor, que cuantifica en 600 euros por embarcación la pérdida económica de la suspensión.

Por esta razón, el regidor oleirense pide «seriedad» a la hora de redactar las normas, pero no reportó ninguna incidencia en el municipio durante el fin de semana, en el que la feria Alfaroleiros, en Santa Cruz, tuvo gran asistencia de público con las medidas de seguridad ya previstas para el evento. «Hubo mucha gente, muy respetuosa», ha concluido.