El Consorcio de Santiago, dentro de su programa de restauración de monumentos, va a iniciar las obras de eliminación de goteras de la cubierta de la Capilla de A Corticela, una intervención que cuenta con un presupuesto de más de 143.000 euros. Se prevé un período de ejecución estimado de tres meses.
La capilla de Santa María La Antigua (conocida como A Corticela) es una parroquia independiente insertada en el conjunto de la fábrica de la Catedral de Santiago, de gran importancia en la historia de la ciudad compostelana.
Con el objeto de erradicar las humedades que se producen en la actualidad por fallos en la estanquidad de la cubierta, y que están provocando daños tanto en las fábricas como en el interior de la capilla, se propone la reposición de la cubierta con teja cerámica. Además, se aplicará un tratamiento para eliminar la polilla. La finalidad de esta actuación es lograr una cubierta ligera y ventilada, garantizando su estanquidad.
Según el arquitecto responsable, Ángel Panero, la intervención propuesta «debe acometerse con la mayor urgencia» con el fin de «frenar el progresivo deterioro y los daños que están generando las humedades en la estructura de madera, en los muros, e incluso en algunas de las piezas de valor artístico y patrimonial existentes en el interior de la capilla».
Se aprovechará además la actuación para eliminar el recrecido de rasillas cerámicas y hormigón soporte de la teja en la actualidad, ejecutado en las obras de los años 60. Asimismo, se llevará a cabo a limpieza de los paramentos de granito, de la que se encargará una empresa especializada en restauración de patrimonio pétreo.
También se repararán las carpinterías metálicas deterioradas y se sustituirán los vidrios que estén rotos, y se renovará la instalación eléctrica para adecuarla a la normativa vigente de seguridad, al tiempo que se llevará a cabo a electrificación del toque de campanas con una central de control programable.