La Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) ha censurado que la Administración autonómica traslade a los alcaldes la responsabilidad de ejercer como «autoridad sanitaria» en episodios de cierres de áreas por brotes de Covid-19, como el que ha sido decretado para la comarca de A Mariña luguesa.
La entidad que preside el regidor de Vilagarcía de Arousa, Alberto Varela, ha salido al paso este lunes de las medidas recogidas por el Diario Oficial de Galicia (DOG) del pasado domingo referentes al cierre de la comarca del norte de Lugo hasta el próximo viernes para combatir el brote de coronavirus.
La Fegamp critica que la Consellería de Sanidade imponga a alcaldes y alcadesas la consideración de «autoridad santiaria» según la cual deberán «garantizar la vigilancia, inspección y control del cumplimiento» de las medidas decretadas en sus municipios.
La federación recuerda que la Ley reguladora de Bases de Régimen Local establece que la gestión de crisis sanitarias recae en la Dirección Xeral de Saúde, es decir, en la Xunta y que, por lo tanto, corresponde a la Administración autonómica coordinar, aportar medios y elaborar planes de actuación para hacer frente a situaciones como la abierta en A Mariña.
En este sentido, los ayuntamientos advierten de sus «limitaciones» en cuanto a recursos humanos y materiales para hacer frente a las funciones que le adjudica la Xunta. Como ejemplo de ello, señalan que «el 60%» de los ayuntamientos gallegos carecen de Policía Local y que un «número significativo» de municipos con este cuerpo cuentan con plantillas mermadas por la tasa de reposición.
Así las cosas, las entidades locales reivindican el trabajo realizado a lo largo de esta crisis sanitaria «asumiendo funciones añadidas e incluso impropias sin disponer de medios extraordinarios para su desarrollo», por lo que demadan a la Xunta que asuma sus responsabilidades para que «la protección de la salud sea igual para todos los gallegos independientemente de la facenda local de cada ayuntamiento».