El Servizo Galego de Saúde (Sergas) ha investigado a 104 personas relacionadas con el foco de COVID-19 detectado el pasado fin de semana en la comarca coruñesa de Barbanza, que se mantiene con nueve positivos.

Así lo ha ratificado este martes el gerente del Sergas, Antonio Fernández-Campa, quien ha explicado que se han realizado 104 PCR, de las cuales 94 han sido negativas y una está pendiente «de conocer el resultado».

Campa ha indicado que las nueve personas con PCR positiva se encuentran en aislamiento y seguimiento domiciliario, mientras que las otras 95 investigadas permanecen en «cuarentena 14 días».

Preguntado si con estos se da por controlado el foco, el gerente del Sergas ha destacado que deben seguir en «alerta» tras haber sido investigado un «volumen muy importante» de contactos de una «forma rápida».

Asimismo, ha incidido en que el Sergas sigue controlando «día a día» la situación de las personas que han tenido negativa la PCR, así como los pacientes con COVID detectados.

Por ello, ha puesto en valor el trabajo de la plataforma de vigilancia y control epidemiológica en Galicia, que detectó este fin de semana pasado la aparición de nueve casos positivos de coronavirus con posible origen en un caso importado de Brasil que llegó a Galicia a principios de junio.

En concreto, según ha informado el Sergas este domingo, los nueve casos se han detectado en las localidades coruñesas de Ribeira y A Pobra do Caramiñal. Por parte del Sergas se ha apuntado que el posible origen de estos contagios «puede ser un caso importado desde Brasil que actuó como vector de contagio sobre un familiar que dio el primer positivo».

CUARENTENA

De este modo, desde que el pasado viernes se detectó el primer positivo del foco identificado la plataforma de vigilancia activó su protocolo de seguimiento, en el marco del que se han realizado PCR a todos los contactos estrechos de este. Así, se han detectado ocho casos positivos en Ribeira y uno en A Pobra.

Según la información facilitada por el Sergas, los nueve casos positivos, que pertenecen al círculo familiar y de amistad de la familia en que se registró el primer caso, han presentado «sintomatología leve» y no han necesitado hospitalización, pero tienen la obligación de permanecer en cuarentena durante 14 días.