El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha asegurado que, hasta este jueves, el Ayuntamiento olívico ha atendido a 3.250 personas solicitantes del Ingreso Mínimo Vital (IMV), frente a la Xunta y al Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), que han tramitado «cero».
En una rueda de prensa, el regidor ha recordado que el Ayuntamiento de Vigo tiene a 7 trabajadores dedicados exclusivamente a atender a esas personas, y doblará ese número en próximos días, cuando se pondrán en funcionamiento 14 puntos de atención en la ciudad para solicitantes de esa renta básica.
Según ha explicado el regidor, son cientos las personas que acuden (muchos de ellos sin cita previa) al Ayuntamiento para gestionar esa solicitud. Mientras, «la Xunta no tramitó nada, y el propio INSS tramitó cero».
«En el resto de España pasa lo mismo, prácticamente nadie, como no sea el Ayuntamiento de Vigo, está tramitando el Ingreso Mínimo Vital», ha proclamado, y ha señalado que, en esa tramitación, uno de los principales problemas, que implica cierta «saturación administrativa», es la emisión de certificados del censo, porque «requiere un tiempo». «Puede haber otros mecanismos, formas distintas de acreditar que se está censado», ha incidido.
Por otra parte, el alcalde se ha referido a la reunión telemática prevista para este jueves con el ministro de Seguridad Social, Inclusión y Migraciones, José Luis Escrivá. Según ha apuntado, en el encuentro le trasladará de nuevo sus «felicitaciones» por la puesta en marcha del Ingreso Mínimo Vital, una herramienta que «va a acabar con la pobreza extrema en el país».
«PORNOGRAFÍA DE LA POBREZA»
Por su parte, los grupos de la oposición han lamentado que el gobierno local no tome medidas para evitar la exposición de los cientos de personas que acuden al Ayuntamiento a informarse o tramitar la solicitud del IMV, y practique la «pornografía de la pobreza».
El portavoz de Marea de Vigo, Rubén Pérez Correa, ha exigido que se tomen medidas para tramitar las solicitudes de manera efectiva y garantizar la intimidad de los ciudadanos, al tiempo que ha precisado que es «falso» que se hayan tramitado más de 2.000 peticiones.
Según ha indicado, no todas las personas que acuden al Ayuntamiento consiguen tramitar su solicitud, algunas de ellas porque no tienen cita y se les tiene que dar (en algunos casos para dentro de varias semanas), o porque necesitan otra documentación. Además, ha denunciado que el teléfono para pedir esa cita, el 010, está «colapsado» y no hay personal suficiente para atender a todas las peticiones.
Por su parte, el concejal del BNG, Xabier Pérez Igrexas, ha subrayado que más de 2.200 personas acudiendo al Ayuntamiento para pedir el IMV «no es motivo para que el alcalde presuma o alardee», sino «un síntoma evidente y preocupante de la emergencia social que hay en la ciudad».
A ese respecto, el edil nacionalista ha recordado que el propio Abel Caballero «no quería ver la realidad» de la pobreza en la ciudad, incluso antes de la crisis del COVID, y ahora esa realidad se hace evidente. Por ello, ha exigido que la administración local ponga en marcha un plan de protección social, con medidas concretas y con «todos los recursos necesarios», además de mantener en funcionamiento los dispositivos extraordinarios de atención a personas ‘sin techo’. «Menos presumir en titulares y más actuar para combatir esa pobreza, porque las colas son una llamada de atención evidente, de que hay que actuar», ha sentenciado.
En la misma línea, el portavoz del grupo municipal del PP, Alfonso Marnotes, ha pedido al gobierno local que no cierre el albergue provisional del pabellón de O Berbés «hasta que no cuente con una alternativa» que, ha apuntado, podría ser el Seminario de la Avenida de Madrid u hostales de la ciudad.
Marnotes ve «evidente» que la crisis del COVID ha hecho «aflorar una pobreza que ya existía» en Vigo y, entre otras medidas, ha planteado que el Ayuntamiento gestione a todos los usuarios de esos dispositivos la percepción del Ingreso Mínimo Vital.
