El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha garantizado la cobertura de los servicios mínimos de bomberos y la «seguridad» en la ciudad después de que el comité de huelga del servicio volviese a denunciar las condiciones de «esclavitud» en las que trabajan los efectivos por falta de personal.
Preguntado tras comparecer en rueda de prensa en la urbe olívica, el regidor ha asegurado que estos profesionales «operan con garantías» y ha afirmado que se garantiza «la seguridad en la ciudad según la normativa», que establece que se debe disponer de, al menos, 16 profesionales en todo momento.
Estas manifestaciones contrastan con la denuncias realizadas por los bomberos este martes, cuando han criticado que «hace 12 días» se les comunicó que se reuniría una mesa de negociación y que se les trasladaría un documento-propuesta sin que se avanzase en ninguno de estos sentidos, ante lo que el regidor ha explicado que se adoptarán las medidas oportunas «cuando llegue el momento» y ha vuelto a insistir en que «está garantizado todo» en relación a la normativa del servicio.
Por su parte, portavoces del comité de huelga ha recordado que, en este momento, trabajan poco más de 100 de los 120 efectivos del servicio, así como que Vigo necesitaría una plantilla mínima de 150 debido a su población. De este modo, han lamentado que, tras «año y medio de conflicto», 10 meses en huelga y dos sentencias judiciales que han dado la razón al colectivo, «nadie» en el gobierno local se sentase con los bomberos para abordar la situación.
Los bomberos han insistido en que no se cumplen los servicios mínimos y han puesto como ejemplo lo ocurrido este fin de semana en el parque de Teis, donde, en ese momento, se contaron cuatro efectivos, y este lunes, cuando el parque de Balaídos disponía de dos bomberos, un conductor y un mando. También han recordado que, a finales de mayo, se produjo una situación similar cuando se declaró un incendio en un garaje de la calle Sanjurjo Badía.
Ante esta situación, han denunciado la «esclavitud» de los bomberos y han afirmado que la imposición de medidas como las guardias localizables provocan «ansiedad» a los trabajadores y «falta de seguridad y garantías» en su servicio.