La portavoz nacional del BNG y candidata a la Presidencia de la Xunta, Ana Pontón, ha propuesto este viernes una ‘agenda urbana’ basada en el «modelo Pontevedra» para afrontar la emergencia climática y la crisis sanitaria.
Acompañada por el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, y por el cabeza de lista por esta provincia, Luis Bará, la líder nacionalista se ha comprometido a que, «si el 12 de julio los gallegos y las gallegas dan al BNG la capacidad para liderar el Gobierno», pondrán en marcha el primer año una agenda urbana en Galicia.
Para Ana Pontón la ciudad del Lérez es una «referencia de cambio transformador» desde el punto de vista ecológico, «un ejemplo internacional» con su modelo que pone a las personas en el centro y que «apuesta por la sostenibilidad y por espacios públicos más amables a una escala humana».
Coincidiendo con el Día Mundial del Medio Ambiente, Ana Pontón ha anunciado que la Agenda Urbana que propone el BNG está orientada a conseguir la «gran transformación que requieren todas las ciudades y las distintas localidades en el país» y que el ejemplo de Pontevedra «es un aval y una garantía» de que el nacionalismo puede conseguir ese objetivo porque tiene «una experiencia importante». «Estamos preparados para gobernar», ha aseverado.
En este sentido, el cabeza de lista por la provincia de Pontevedra, Luis Bará, ha insistido en que «el PP no tiene un modelo encima de la mesa», mientras que el del BNG se puede «comprobar y contrastar».
REDUCIR LA CONTAMINACIÓN
Según ha detallado Ana Pontón los principales criterios que se incluirán en la propuesta de Agenda Urbana del BNG pasan por la minimización de la contaminación urbana de todo tipo, la reducción efectiva de las emisiones de gases de efecto invernadero y también medidas para lograr que los asentamientos humanos sean cómodos, agradables y seguros, con especial énfasis en la «actualmente muy deficitaria seguridad viaria».
Además, el Bloque aboga por el compostaje de la fracción orgánica, limitar la ocupación indiscriminada del territorio y por reducir el consumo de energía de los servicios urbanos.