-Desde la posición de secretaria general de CC. OO. Galicia, ¿cuál sería el primer análisis que hace sobre el estado económico y laboral en el país?
Ahora mismo tenemos muchos retos y desafíos sobre la mesa. No lo digo solo por la situación post- COVID, sino que ya de antes teníamos una crisis industrial en nuestra comunidad. A esto había que sumarle los procesos de digitalización en la banca y también esa revisión sobre la política de cuidados, dependencia, refuerzo del sistema sanitario y de la Atención Primaria. En definitiva, los desafíos que tenemos van a traer mucho trabajo.
-El pasado miércoles 26 de mayo llegaba un acuerdo para la prórroga de los ERTE, mismo para autónomos, todo después de rifirrafes entre empresarios, sindicatos y Gobierno. ¿No tuvo la sensación de que existía una tensión muy elevada durante el proceso negociador?
Las negociaciones no son fáciles debido a la cantidad de posturas que se ponen sobre la mesa. Al final lo que prima es el interés general y llegar a un acuerdo. Todas las partes tendrán que ceder en algún punto si se quiere llegar a buen puerto. Para mí lo prioritario es mantener el Real Decreto de los ERTEs, es muy necesario pues permitió que no se destruyera empleo de manera indiscriminada. Yo me quedo con esa parte, pero siendo consciente que unas negociaciones dentro de esos niveles nunca son fáciles.
-¿Observa alguna diferencia entre la actitud de la ministra Yolanda Día y la del ministro Escrivá dentro de la posición negociadora del Gobierno?
No puedo dar ningún dato sobre este punto más allá de alguna información que puedan transmitirme compañeros de la Confederación, por tanto, para mí es complicado percibir ese tipo de sensaciones. Lo real es la existencia de dos sensibilidades dentro del Gobierno, dos partidos en coalición y ambos con posturas diferentes en diversas materias.
Para mí lo prioritario es mantener el Real Decreto de los ERTEs, es muy necesario pues ha permitido que no se destruyera empleo
-¿Son esas diferencias las que se vieron en el Congreso de los Diputados entre la defensa de la derrogación de la Reforma Laboral de 2012 por parte de la ministra Díaz, y la postura menos a favor de la ministra Calviño?
No sé si obedece a esas diferencias, pero sí es cierto que en determinadas áreas hay criterios muy distintos. No obstante, a nosotros, a CCOO, lo que nos debe preocupar son las premisas que expusimos durante nuestras movilizaciones como son el aumento del salario mínimo, derrogación de la reforma laboral del PP y la derrogación de la reforma de las pensiones. Así pues, esas discrepancias dentro del Gobierno no nos deben desviar de alcanzar nuestros objetivos.
-¿Dónde está entonces la dificultad real para la derrogación de esas dos reformas?
En que hay muchos intereses de por medio, con empresarios con mucho poder detrás. En algún sentido incluso hay capacidad de veto. Por eso nosotros decíamos que sin acuerdo en la mesa de diálogo de lo social y en el campo de la reforma laboral, el Gobierno tendrá que legislar, pero hay un acuerdo de compromiso electoral y hay un compromiso de pacto de gobierno. Nosotros exigiremos que se cumpla, con todo, insisto que hay muchos intereses, muchos lobbies dentro de este país presionando para la no derrogación de la reforma laboral.
–Teniendo en cuenta a esos lobbies, hace poco se comentó la idea de control sobre personas con cierta influencia entrando y saliendo de los parlamentos. ¿Es necesario prohibir ese tipo de contactos?
Hay determinados contactos que cuando estás en un cargo de responsabilidad son complicados de entender. En un cierto momento pueden condicionar o pueden hacer no tener claras las decisiones que se habían debido tomar. Entonces sí, debería haber algún tipo de control para este tipo de situaciones.
El que nos debe preocupar es el aumento del salario mínimo, derrogación de la reforma laboral del PP y la derrogación de la reforma de las pensiones
-Vivimos tiempos de cambios en los paradigmas productivos, mismo energéticos. ¿Cómo puede hacerse una transición energética de manera justa, social y sostenible cuando, por ejemplo, tenemos cuestiones como As Pontes, Ence o el naval que ahora mismo reclaman soluciones?
De partida, el cambio de sistema y paradigma no puede llevar parejo el dejar a parte de la población atrás. El medio ambiente y la sostenibilidad marcan la hoja de ruta, aun así, debemos tener en cuenta la otra parte. También es necesaria cierta pedagogía sobre un punto, las empresas del país deben tener claro que la parte más importante es su capital humano sin reducir todo a maximizar el beneficio. También hay algo, que lo decía el presidente del CES, Antón Costas, las empresas del futuro deberán tener una responsabilidad social, territorial e institucional. Deberán estar comprometicas con el país no solo con la creación de empleo sino que debe ir más allá. Es decir, compromiso con su contexto más inmediato y no solo con el incremento de los números.
Hay muchos intereses, muchos lobbies dentro de este país presionando para la no derrogación de la reforma laboral
-Uno de los mantras más usados desde la esfera política es el de la necesidad del emprendimiento y destinar dinero a nuevas ideas. ¿Desde el análisis de CCOO Galicia, se está enviando dinero suficiente para el emprendimiento?
No, la verdad es que no, en realidad debería haber un compromiso de todas las administraciones. Entiendo que las posturas políticas son legítimas, pero como país nos estamos jugando mucho. Aparte del “sector tractor” que es la industria, hay otros con capacidad de encajar en el mecanismo que son nuestros sectores productivos y el mercado de trabajo. Debe existir una apuesta pública por esa reindustrialización tal como llevamos pidiendo desde hace tiempo en CCOO, pues al final hablamos de trazar las líneas de futuro de nuestro país. Esto lo pudimos ver durante la pandemia. Un ejemplo claro es cuando alcanzamos la máxima situación de estrés en la sanidad, no teníamos respiradores y hubo que improvisar en una fábrica de vehículos unos nuevos aparatos. Con esto quiero decir que debemos ser conscientes del momento en que estamos para tener una referencia de partida y saber a dónde debemos llegar de cara al futuro. Por eso apelamos a la implicación de todas las administraciones y CCOO como organización estará haciendo propuestas no solo en el campo laboral sino también en el social.
-Por tanto también le pide a las administraciones seriedad, solvencia y rigor en inversiones y políticas a medio y largo plazo.
Yo digo que sobre las decisiones de futuro hay materias ya impuestas por los Fondos Next Generation. Por eso dentro de los documentos sobre la reconstrucción apuntábamos tener un tacto especial con el sistema de cuidados o de dependencia, lo pudimos ver durante la pandemia. Dentro del sistema de dependencia hay unos defectos que deben ser solucionados. El sistema sanitario sufrió un test de estrés brutal, por tanto también es necesario reforzar nuestra Atención Primaria. Por eso pedimos implicación desde las administraciones sobre lo público, porque lo público es servicio. Lo público son los pilares de nuestra sociedad, la educación, la sanidad o la dependencia y son también los más sensibles.
-Usted ha señalado la necesidad de la defensa de los intereses de la clase trabajadora. ¿Alguien la ha acusado de anticuada hablando sobre lucha de clases o le han dicho que las clases ya no existen?
Nadie me me ha acusado de eso, pero sí es cierto que en algunos ámbitos he oído eso de “ya no existe la lucha de clases” y desde CCOO no lo compartimos. En una empresa no hay un principio de igualdad entre trabajador y empresario, el trabajador tiene un sustento detrás. Ahí estamos las organizaciones sindicales para organizar los intereses de clase, porque cuando ti en una mesa comparas una movilización con la otra parte, tienes que estar organizaco con unos objetivos claros y sobre todo, cuando te preguntan “¿por que deberíamos afiliarnos a un sindicato?”, mi respuesta es que cuándo se firma un contrato estás comprometido a unas cuestiones y la empresa a otras. La empresa defenderá sus intereses y tú tienes que defender los tuyos y no puedes hacerlo solo, no estás en igualdad de condiciones. Por eso defiendo la necesidad de la afiliación para defender los derechos que tienes como trabajador y trabajadora.
Debemos ser conscientes del momento en qué estamos para tener una referencia de partida y saber a dónde debemos llegar de cara al futuro
-Si antes hablábamos de la presión de los lobbies, en el caso de empresas como Ence o Alcoa, ¿es el mismo tipo de comportamiento de estas firmas lo que impide una solución a las problemáticas laborales alrededor de ellas?
En el caso de Alcoa creo que es una cuestión de actitud empresarial. Ya tenemos ganadas dos sentencias en ese sentido y con la actuación de la Fiscalía que inspeccionó en Alu Ibérica. En cuyo caso hay algo más que presión. Luego está lo de antes, las empresas solo miran el rendimiento y los y las trabajadoras dicen “somos un simple número en la empresa”. Creo necesario incrementar la actividad y presencia de Recursos Humanos, pues por algo se llama así esa sección.
-Volviendo a los Fondos Next Generation, ¿no tienen miedo a que sea una oportunidad perdida? ¿No ven la actitud de la Xunta como “oscurantista”?
Sí, tenemos miedo y así lo transmití en estos últimos días insistiendo en la rigurosidad, seriedad y solvencia de los proyectos que se presenten. No se trata de “vienen millones de Europa y vamos a presentar estas ideas”, no es así. Jugamos con el futuro del país, vamos a tener que hilar fino. Sí, la Xunta pasaba un listado de proyectos y que no podía ampliar más. Seamos serios, las organizaciones sindicales y CCOO la primera, sabemos de sobra cuándo se puede trasladar una información o no en relación a las ideas y proyectos presentados para los Fondos Europeos. Por eso desde CCOO pedimos estar presentes en la mesa donde se diseñaban las líneas de acceso para los Next Generation. Entendemos que estuvieran los empresarios y las autoridades, pero los sindicatos somos parte importante de este país y deberíamos haber estado en esas mesas.
-¿Presionarán para estar ahí?
Sí, ya lo hizo el anterior secretario general y la anterior ejecutiva. Nosotros haremos lo mismo.
-¿Cuál sería el primer paso desde CCOO para que la Xunta exponga las ideas destinadas a los fondos de reconstrucción?
Primeramente debes adoptar el cauce formal, algo importante en casos como este. Debemos hacer ver a la otra parte que somos un elemento imprescindible del diálogo social y por eso tenemos que estar ahí, hablando con ellos y explicando la necesidad de la presencia de las fuerzas sindicales.
-¿Los 140.000 millones de euros destinados a España, serán suficientes?
Se sabemos aprovechar bien la cantidad asignada ya tenemos una parte del camino andado.
-¿Existe el temor al aumento de la precariedad laboral y de los salarios bajos a pesar del cambio industrial y la llegada de los fondos de la UE?
La precariedad lleva mucho tiempo instalada y se incrementó mucho más con la reforma del PP de 2012. Es por eso que reclamamos el aumento del salario mínimo y sobre las cuestiones empresariales del día a día habrá que aplicar la negociación colectiva, pedimos además la primacía del convenio de sector sobre el de empresa, porque este punto fue aprovechado por las empresas para las reducciones salariales y de condiciones. Por tanto, esto es cuestión del día a día pero no es determinante porque por desgracia la precariedad lleva con nosotros mucho tiempo.
Desde CCOO pedimos estar presentes en la mesa donde se diseñaban las líneas de acceso para los Next Generation
–Para recuperar el dinamismo económico del país, ¿cuáles son los servicios públicos con mayor necesidad de recuperación?
La apuesta por la educación, que es una apuesta de futuro, de construcción de país y sería suicida no hacerlo. Apostar por la sanidad pública después de ver como se vio presionada durante lo más duro de la pandemia junto con la mejora de la rotación y relevos en la sanidad pública. También debemos incrementar las políticas de protección social, en este caso por los cambios económicos y no dejar a nadie atrás y la ayuda en el hogar con salarios en condiciones. Debe haber un compromiso de la administración con lo público.
-¿Cuál sería la huella que le gustaría mostrar con respeto a los compañeros que la precedieron en la secretaría general de CCOO Galicia?
A mí me gusta escuchar, ponerme en el papel del otro para saber trazar las líneas necesarias y sobre todo equipo, empoderar el equipo. Hay muchos y muchas compañeras en las CCOO involucradas en la defensa de los intereses de clase. Quedaría con eso.
-¿Sobre la visibilización del trabajo de la mujer y equiparación salarial, cuál es la postura que se va a seguir en este punto?
CCOO creo que siempre hemos sido vanguardistas en igualdad y visibilidad. Aún así, la lucha por la igualdad retributiva, disolver la hendidura salarial que denunciamos desde siempre, creo que es un trabajo que nos acompaña desde hace años. Ser secretaria general no es más ni menos, es que a efectos de igualdad quiere decir que la igualdad ha llegado, rompemos los techos de cristal. Sí es cierto que en los últimos meses de pandemia hubo un retroceso puesto que quien volvió a casa para tareas de cuidados fueron las mujeres. Ahí sí que hubo un paso atrás que debemos analizar.
-¿Están previstas acciones conjuntas con las demás fuerzas sindicales en Galicia?
Tenemos unidad de acción con UGT a nivel confederal y eso se traslada hacia abajo en todos los ámbitos y estructuras del sindicato. Con la CIG en momentos determinados y en ámbitos donde sea necesaria una unidad de acción por negociación colectiva, pero una unidad estructurada de las tres centrales en Galicia es complicado.
La lucha por la igualdad retributiva, disolver la brecha salarial que denunciamos desde siempre, creo que es un trabajo que nos acompaña desde hace años
-¿Una candidatura de Yolanda Díaz podría dar fuerza electoral a políticas más progresistas?
Ahí entramos ya en un ámbito personal. Siempre he dicho que trabajadores y trabajadoras debemos apoyar políticas de signo progresista. Todo depende de las sensibilidades de cada trabajador y trabajadora para elegir entre distintas opciones. Nosotros decimos siempre que la clase obrera debe optar por políticas que nos apoye.