3 de marzo. Saltan las alarmas en Galicia. Las pruebas realizadas a un hombre de 49 años dan positivo. Había acudido dos días antes al Complejo Hospitalario de A Coruña con una neumonía vírica y su estado era ya grave. Había llegado a Galicia dos días antes, el 29 de febrero, de Madrid en un coche compartido para realizar una entrevista de trabajo en Inditex. La Xunta dice que la situación “está controlada” por que el caso es importado y que el “virus no circula” por Galicia.
Mes y medio después de aquel primero caso, la situación en Galicia es muy diferente. El 20 de abril son ya más de 6.300 contagiados y casi 460 muertes. Muchos contagiados tras el gran foco que explotó en Madrid. Pero, realmente, ese hombre ingresado el 3 de marzo de 2020 era el paciente 0 de Galicia?.
Gracias a los numerosos estudios que se están realizando en las ultimas semanas podemos saber que la COVID-19 estaba ya en Galicia antes de ese supuesto paciente 0, y también antes de marzo. Así lo recoge, cuando menos la información proporcionada por NextStrain, un proyecto de código abierto con información pública de hospitales y laboratorios de todo el mundo. La plataforma, en la que participa una veintena de científicos, rastreó las distintas mutaciones del virus y creó un árbol filogénico en tiempo real para determinar cómo se está propagando. Pues, gracias a esta herramienta, sabemos que había contagiados en España ya en enero y en Galicia, probablemente en el mes de febrero.
Siguiendo la secuenciado genética de la COVID-19, NextStrain, con fechas que se remontan a las dos últimas semanas de febrero, dibuja un escenario de introducción del virus en el conjunto del Estado en tres mutaciones, dos que venían de China y Reino Unido a través de Valencia, con una ramificación en Burgos, y otra que tiene origen italiano pero que saltó desde Valencia a Madrid y Galicia.
Por eso, no es descartado avanzar, siempre según este mapa genético, que ni Italia, ni España, fueron los focos principales del virus en Europa, sino que este habría entrado en la península por distintos focos, tanto desde China como desde lo Reino Unido. De hecho, la finales de febrero ya había un paciente de contacto comunitario en Sevilla, lo que hace suponer que el virus ya comenzaba la circular por todo la península.
DIVERGENCIAS GENÉTICAS
En la investigación genética realizada por NextStraim de España, se encontraron tres divergencias, o tres focos de contagio diferentes. Uno se registró en el Hospital General Universitario de Valencia y procede de la provincia de Hubei en un 50%, de Shanghai en un 33% y de Guangdong en un 4%. Su fecha estimada de llegada a España está entre lo 16 de enero y el 21 de febrero y tiene una extensión en Burgos registrada el 4 de marzo.
Otra se registró en el Hospital General Universitario de Valencia y procede en un 99% de Inglaterra. Las fechas estimadas de llegada a España están entre lo 28 de febrero y el 2 de marzo. Y la última, registrada en el Instituto de Salud Carlos III procede en un 40% de la Comunidad Valenciana, en un 13% Génova, en un 10% Madrid y en un 10% Galicia.
Esto significa que ese foco detectado en Madrid había presencia de genes portadores de Galicia. Una de las teorías aportadas por el periódico Público indica que países como Alemania, Reino Unido y Suiza, están en el origen del contagio a nivel europeo, puesto que estos países son los centros empresariales con más contactos comerciales con China, los primeros por negocios, el segundo por los bancos.
El virus estuvo circulando desde lo 17 de noviembre por toda China. Durante casi un mes, las autoridades chinas no tomaron medidas extraordinarias como las que acabarían tomando finalmente con el cierre de toda la provincia de Wuhan. Eso provocó que numerosas empresas habían seguido realizando sus actividades con movimientos de población a nivel mundal.