Las incertidumbres paran sobre el curso 2021-2022. Padres y madres de alumnos temen la vuelta al sistema anterior a la COVID. Los sindicatos de profesores calculan que los ratios de alumnos-profesor volverán a los valores anteriores a 2020. Intuyen que la Xunta dejará de contratar personal docente que permitía desmasificar. Añaden también que las autoridades educativas no hicieron estudios sobre la pertinencia o no de los diferentes programas aplicados durante este pasado curso, la mayoría destinados a la docencia virtual y digital. La Consellería de Educación, encabezada por Román Rodríguez, espera la respuesta del Gobierno central en relación a las medidas y protocolos sanitarios que se deban aplicar. Curricularmente las espectativas están centradas en sus programas como el Plan Recupera, acciones formativas del profesorado, Plan de Ensino Virtual, el Plan de Infraestructuras Digitales en la Educación (EDU100) y el E-Dixgal. De todas formas, las posturas están aún por acercarse.
PREVENCIÓN CONTRA LA COVID
Fernando Lacaci, de Anpas Galegas, ve solo incertidumbres en cuanto a la seguridad sanitaria del alumnado. De momento no tiene seguro se se aplicarán las mismas medidas que el curso presente, casi finalizado, y desconoce las capacidades del sistema para adaptarse a nuevos marcos sanitarios. “Las aulas fueron desmasificadas en secundaria y no se hizo ningún estudio sobre se eso redujo las posibilidades de contagio”. Luz López, de CC. OO., apunta que gracias a las huelgas de los profesores “se pudieron hacer desdobles en las aulas y el resultado no fue tan malo”, mas lo desdoble se aplicó tarde y “los protocolos de seguridad se fueron modificando segundo avanzaba el curso”.
“No tenemos noticias de que se tomaran medidas sanitarias de cara al curso que viene” señala Lois Pérez del STEG. “Entendemos que para evitar riesgos lo básico sería reducir el número de alumnos por aula”. Esto nos vuelve a llevar a los desdobles que, según Antón Bermello de CIG-Enseñanza, “fueron positivos, hubo una merma de expedientes disciplinarios y también un aumento en la promoción del alumnado”. Pero yendo a la situación sanitaria, Bermello señala casos donde “los centros tuvieron que formarse por sí mismos con los EPIs que les enviaban”. Es decir, no había formación en seguridad por parte de la Xunta.
Desde UGT, Sandra Montero entiende que las autoridades gallegas “están eludiendo muchas de sus responsabilidades poniendo el punto de mira en los responsables sanitarios”. Además apunta que para esto, la Xunta está apoyándose en la autonomía de la dirección de los centros para dejar ver que “los centros son los responsables de gestionar la disponibilidad de material de protección frente al coronavirus”.
Desde la Consellería de Cultura, Educación e Universidade, en lo tocante a los efectos de la COVID para el próximo curso, este departamento indicó a Galicia Confidencial que se enviaron dos cartas, una a la ministra de Sanidad y otra a la de Educación encaminadas a planificar el período 2021-2022. En ellas piden la convocatoria del Consejo Interterritorial de Salud y de la Conferencia Nacional de Educación. “Creemos que es totalmente necesario conocer con certeza el marco de actuaciones que tendremos que afrontar las comunidades, y partimos de una posición de colaboración leal con el Ejecutivo central a la hora de abordar este asunto”.
ALUMNADO Y FORMACIÓN
Un aspecto ya apuntado como es la ratio, número de alumnos por educador, es una de las cuestiones pendientes desde hace tiempo en los centros educativos. Con la llegada de la pandemia, las autoridades autonómicas entendieron, “tarde” según las fuentes consultadas, que disminuir el número de alumnos permitiría mejoras importantes en lo tocante a la calidad de la enseñanza y de aprendizaje, con mayor atención por parte del profesorado.
“El número de estudiantes por aula en secundaria se rebajó y aun así, no se hizo ningún estudio sobre se fue positivo o negativo” señala Lacaci. Los desdobles de alumnos, por otra parte, permitieron la contratación de más personal docente. Antón Bermello apunta que aproximadamente “el incremento de puestos pudo estar en 1.300 nuevas contrataciones, algo más de 140 fueron para primaria”. De mantenerse para el próximo ciclo educativo las mismas cifras de contrataciones, podría observarse, según los sindicatos, una mejor calidad en la enseñanza. Como apunta Bermello “con los desdobles los expedientes disciplinarios bajaron y hubo más alumnado que pudo promocionar”.
Si fueran ciertos los temores la una vuelta a los números pre- COVID, para Lois Pérez “habrá uno deterioro importante en la calidad de la enseñanza pública y eso puede traducirse en un trasvase a centros concertados”. Y otra consecuencia de esa hipotética “vuelta atrás” sería la “falta de atención de cara al alumnado que más lo precisa”, como serían repetidores de curso o necesiten de una atención más especializada.
En otra orden de cosas, la formación online del alumnado “no está organizada a día de hoy, ni el teletrabajo” dice Luz López. En ese sentido, desde Anpas ven que la formación del profesorado en cuanto a nuevas tecnologías “es una broma pues muchos se formaron por su cuenta mediante tutoriales”. En cuanto a programas como E-Dixgal, Antón Bermello señala que “no hay ninguna evaluación sobre este punto, simplemente hacen un relevo del libro en papel por un ordenador”.
Sandra Montero es optimista en cuanto el programa E- Dixgal aunque depende mucho de los recursos materiales y personales de los centros. Sobre el Plan de Enseñanza Virtual, “insistimos en nuestra defensa de la enseñanza presencial ante lo virtual por las dificultades en situaciones concretas y que son difíciles de paliar”. Los medios disponibles para su distribución en función de las necesidades del alumnado “son muy escasos por lo que se traduce en un empeoramiento de la calidad de la enseñanza, que si es online es un buen complemento del presencial pero no un sustituto”.
La Consellería de Educación por su parte que E-Dixgal está dentro de la estrategia Edudixital 2030. Este es un intento de que la digitalización entre de manera completa en la enseñanza y su objetivo es “integrar equipamientos, contenidos y adquirir competencias STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas)”. Todo esto de cara a incorporar la Inteligencia Artificial en todos los niveles educativos, diseñar estrategias docentes e introducir noticias técnicas de pedagogía.
Las conclusiones que permiten distinguir algunos puntos del curso 2021-2022 son la necesidad de mantener bajos los rateos de alumnado. Los docentes pueden ver rebajado su número en cuanto Educación vea que «todo vuelve al arroyo» y más de 1.000 personas quedarían sin trabajo. La formación tanto del alumnado como profesorado con las TIC evidenció falta de concreción en programas formativos y la brecha digital en la sociedad. Existe por otra parte, una sensación de que la Xunta descarga responsabilidades tanto en centros como en el Gobierno central, cuando «tiene el 100% de las competencias» como señalan desde STEG.